DOI: https://doi.org/10.33881/IBR0054
En el contexto de la distribución de energía eléctrica, las pérdidas no técnicas se refieren a la electricidad que se pierde debido a razones que no están relacionadas con fallas físicas en el sistema eléctrico [1]. Estas pérdidas pueden ocurrir en diversas etapas del proceso de distribución y pueden ser el resultado de actividades fraudulentas, errores en la facturación, problemas de gestión o gobernanza del servicio en Colombia.
Las pérdidas no técnicas en el servicio de energía eléctrica pueden clasificarse en varios tipos, cada uno con sus propias características y causas, se pueden dividir en: 1) Robo de energía, 2) Errores de facturación, 3) Fraude interno, 4) Corrupción pérdidas comerciales, 5) No cobros por sustento legal [2]. Si se hace referencia al robo de energía, es cuando los consumidores o usuarios finales del servicio realizan conexiones ilegales o manipulan los medidores para consumir electricidad sin pagar gran parte de ella [3]; esta mala práctica incluye la instalación de cables clandestinos, la alteración de medidores o la manipulación de registros de consumo.
AUTORES
Diana Carolina Candia Herrera
Karla Yohana Sánchez Mojica